He decidido volver a tejer...
Cuando era más jovencita hice algunas bufandas, pero tenía la supervisión de mi madre que me preparaba todo para empezar, me cogía los puntos cuando se me escapaban, me cerraba los puntos al terminar, y claro... todo era bastante fácil.
Al ver en la
blogosfera las cosas tan bonitas que se pueden hacer con dos agujas, se me ponían los dientes largos...
Una amiga tras escucharme decir que quería hacer punto me dejó el libro
El círculo del punto de Ann Hood, y la verdad es que me he sentido más capaz de tejer.
Así que la semana pasada me decidí a comprar un ovillo y unas agujas para
reiniciarme en solitario, aunque con consultas telefónicas a mi madre, y ayuda también de los tutoriales de
Youtube.
He practicado un poco derecho, revés, punto de arroz, y tras corroborar que recuerdo como se hace (todavía de forma muy básica y sin demasiada técnica), he pensado un proyecto y esto es lo que hay (de momento) en mis agujas...